jueves, 7 de enero de 2010

El monje que vendió su ferrari

Lectura recomendada. No podeís dejar de leer este libro. Es fantástico. Saludos,

martes, 5 de enero de 2010

inspirado en la obra “Corazón de Niño” del poeta visual Antonio Gómez

PENSAMIENTO.

Ese corazón que aparentemente parece de madera y dónde encierra tantos sentimientos. Corazón de niño, lleno de ilusiones, de comportamientos imitados, de inocencia, de timidez, ese corazón que madurará y que quizás con el paso del tiempo, se hará duro e insufrible. Ese corazón en su más hondo sentir, encierra toda una vida, que late y siente en la madurez como un niño. Ese corazón que en la madurez se le pone la coraza para no poder sentir.

lunes, 4 de enero de 2010

relato: El cadáver de mi hermana

Escuché un eco claro, profundo, metálico y estruendoso aunque al parecer amortiguado. Yo me precipité hacia la silla que más cerca tenía para poder apoyarme en ella. Mis ojos permanecían fijos ante ella y en su semblante reinaba una pétrea rigidez. Me acerqué hacía ella y cuando coloqué la mano sobre su hombro, un fuerte estremecimiento recorrió todo mi ser, una lánguida sonrisa asomó en sus labios y vi que hablaba con un murmullo apresurado e incoherente que solo yo podía escuchar.
Escuché sus primeros débiles movimientos dentro del ataúd. Los oí y sin embargo no me atrevía a hablar. Y ahora, esta noche he oído resquebrajarse la puerta. Diría mejor, las resquebrajaduras de su ataúd, el chirriar al abrirse.
-¡Oh! ¿A dónde huir? ¿No se presentará aquí enseguida? ¿No vendrá apresurada para echarme en cara mi precipitación?
-¡Oh Dios! ¿Acaso no estoy escuchando sus pasos por la escalera? ¿Es que no percibo el pesado y horrible latir de su corazón?
-Me estaba volviendo ¡Locooo!.
Oprimido, asombrado y con un terror extremo, conservé la suficiente paciencia para que nadie presenciara mi excitación y nerviosa sensibilidad.
No podía por menos de pensar en el extraño ritual que se había practicado, conservando el cadáver durante diez días (antes de su entierro definitivo) en una de las numerosas casas situadas en aquel campo de árboles podridos y aguas estancadas.
Había dado unas cuantas vueltas en la cama, cuando unos ligeros pasos atrajeron mi atención. Un instante después llamó a mi puerta y entró. Su rostro presentaba, como de costumbre, una palidez cadavérica. Su aspecto me espantó, vagaba por la habitación con pasos apresurados y carentes de objeto. Había sangre sobre su blanco traje y muestras de lucha en su cuerpo; luego, con un grito apagado, cayó pesadamente hacia delante sobre mí y en su violenta agonía me arrastró al suelo. ¡Quería huir de aquella habitación!.
Cada noche, al acostarme, experimento un temblor aterrador, me empeño en no dormirme y las horas pasan y pasan. Me invade una peculiar tristeza que me aflige. La grave y larga enfermedad de mi hermana a quien quería, mi única compañía durante largos años, mi último y único pariente de la tierra. Su muerte me dejaría indefenso, débil, desesperado y en un alto grado de locura.
Pero mis esfuerzos son vanos. Un temblor irreprimible invade mi ser y, al final, me vuelvo a dormir.

domingo, 3 de enero de 2010

Bienvenida de Matilde

Buenos días:

Hoy es 03 de Enero de 2010 y acabo de crear mi blog. Con él lo que quiero es compartir mi afición a la lectura y publicar algunos de mis escritos.
Si necesitas recomendaciones literarias, puedes consultarme. Asimismo, me gustaría que si lees mis relatos y escritos, me dejes tus comentarios.
Saludos y bienvenidos a mi blog.